El segundo domingo de mayo, como todos los años, una gran cantidad de personas hombres y mujeres de toda edad, concurrieron al cementerio general de Chincha, para orar ante la tumba de sus esposas, o familiares mujeres al recordarse el día de la Madre, dejándole a la vez ramilletes de flores.
Por encargo de la Sociedad de Beneficencia pública de Chincha, que preside la Sra. Carmela Puccinelli de Ruiz, se realizó a las 10.00 de la mañana, una Misa en la capilla de este camposanto, la que fue oficiada por el Párroco de la Parroquia Santo Domingo de Guzmán, P. Marco Antonio Martínez Ruiz, acto que se vio bastante concurrida.
Las flores como los pasajes que cobraban la mayor parte de moto taxistas, sufrió un considerable recargo por la demanda de flores y el precio de los pasajes por ser el día de las madres.
A parte de ello, personal de Vigilancia del Cementerio no se dio abasto para el control de los vendedores ambulantes y el personal policial, como en años anteriores, fue su número insuficiente y no pudo controlar el tráfico vehicular por el desorden en que propiciaban los mismo conductores de vehículos que buscaban ser escogidos por los usuarios para prestar sus servicios.
Las miles de personas que acudieron al cementerio, tuvieron que sortear el paso de los vehículos para poder librarse de accidentes de tránsito que ponían en peligro sus vidas.
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